Ojalá pudiera darte el mundo que
te mereces. Crear un espacio en el que dejes de ser tan vulnerable para que así
entiendas que el problema no eres tú, sino quien te rodea. Un sitio donde creer
en las personas no sea una locura o una idea arriesgada de alguien que no ha
aprendido todavía. Donde la gente todavía cree que el corazón es algo esencial
para seguir viviendo, olvidándose del sentido literal.
Te mereces un mundo en el que la
gente sonría de verdad. Donde estar rodeado de personas vuelva a significar
estar acompañado, no solo entre una multitud. Un mundo que no haya sido
corrompido por los deseos y las ambiciones de nadie, incluso de aquellos que
predican como ley universal el “ama al prójimo como a ti mismo”, porque durante
miles de años se han olvidado de enseñarnos el truco: “como a ti mismo”. También se han olvidado de que nos queremos a
nosotros mismos porque primero hay alguien que nos quiere. Y por eso siempre
pensé que eres de las pocas personas que saben lo que es querer de verdad,
porque nunca has antepuesto lo que eres tú a lo que son los demás. Igual es eso
lo que te hace diferente aunque te duela. Pero ojalá pudiera darte un mundo en
el que no fueras la excepción.
Lo siento, y de corazón. Siento que
aquí las cosas no funcionen así. Siento tener que verte llorar de vez en cuando
porque las personas te hacen daño. La gente no sabe querer. Ni cuidar si no es
hasta que dejen de necesitarte. No saben depender de los demás porque alguien
les ha metido en la cabeza que ellos se valen a sí mismos, solos. Suena
estúpido, nadie sobreviviría solo. Y por eso se sienten incómodos cuando
empiezan a querer un poquito, o a depender un poquito. Y huyen. Y es ridículo
que tampoco les guste sentirse solos.
Sé que ahora mismo no vas a poder
entenderlo. Que seguirás con tus deseos de cambiar las cosas y seguirás cayendo
esos días en los que te des cuenta de que esa lucha se te queda grande. Créeme
que si las cosas pudieran cambiarse yo ya las hubiera cambiado para ti.
Solamente quería decirte que seas valiente y sigas, que aunque la vida te va a
doler muchas veces el mundo sin ti sería un poquito peor.